Pablo Roy se siente muy afortunado por haber podido presenciar nacimientos de Leones Marinos, Focas y Pingüinos. A continuación nos cuenta alguno de estos momentos tan especiales.
El nacimiento de Neo, una foca gris, ha sido la última incorporación a la instalación de mamíferos marinos.
"Las focas grises tienen un cachorro en cada parto y Neo nació tras más de once meses de gestación. Su madre le parió fuera del agua, sobre el suelo. Al nacer, las crías de foca gris están recubiertas de una capa de pelo de color blanquecino que se llamada lanugo, este pelo lo perdió aproximadamente al mes de nacer.
Durante ese periodo de tiempo, Neo no pudo meterse al agua, ya que su pelaje no era buen aislante. Además, si se mojaba, el pelo absorbería el agua y pesaría mucho, por lo que podría correr el peligro de ahogarse. Por este motivo, durante el primer mes Neo estaba vigilado constantemente para que no se fuera a la pequeña piscina que su madre tenía en la instalación/paridera.
Neo mamaba constantemente y tuvo un crecimiento muy rápido, casi engordaba dos kilos diarios. Cuando llegó el cambio de alimentación, comenzó a comer pescado sin ningún problema y ahora se ha convertido en un verdadero glotón
El buen comer de Neo me da pie para contaros la historia de Clara, una foca vitulina que cuando nació tuvimos que estar casi dos días intentando que mamara, ya que su madre era primeriza y era bastante inexperta.
Al final lo conseguimos y se desarrolló perfectamente. Ahora está en el Oceanográfico de Valencia y nuestros compañeros valencianos nos han dicho que ha sido mamá recientemente.
Es fantástico tener la oportunidad de participar en situaciones de tanta intensidad y, sobre todo, tener la recompensa de que todo salga bien."