¡Solo por tiempo limitado! Descubre cómo conseguirlo aquí
Nuestra página de venta de entradas se encuentra en labores de mantenimiento temporalmente. Para realizar tu compra, accede de nuevo en unas horas. ¡Te esperamos!
¿Qué estás buscando?
La Tortuga Boba (Caretta caretta), también conocida como tortuga cabezona por el tamaño de su cabeza, es una especie marina que se puede encontrar en todos los océanos del mundo y en mares como el Mediterráneo. Aunque en España no nidifica de forma habitual, es la tortuga más abundante de nuestras costas.
Son tortugas grandes que pueden llegar a medir casi el metro de largo y pesar unos 135 kilos. El color de la piel va desde amarillo al marrón, y el caparazón suele ser entre marrón y rojizo. Son animales omnívoros que se alimentan principalmente de moluscos y crustáceos gracias a sus grandes y poderosas mandíbulas.
La tortuga boba es un animal solitario y migratorio. Aprovecha las corrientes marinas para desplazarse, haciendo grandes viajes a lo largo de su vida. Anida en playas tropicales donde excavan sus nidos y depositan sus huevos entre junio y agosto. Para hibernar, prefiere las aguas profundas donde pueden pasar semanas sin subir a la superficie para respirar.
En las costas españolas se han producido avistamientos de tortugas bobas: desde la costa de Cataluña, a la de Valencia, Andalucía, Murcia, Islas Baleares y Canarias, e incluso en el Cantábrico. Entre el Cabo de Gata y el Cabo de San Antonio con las Pitiusas se encuentra la mayor concentración estival de esta especie.
La tortuga boba está considerada una especie en peligro de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. La pesca no selectiva, la destrucción de su hábitat, la contaminación marina o el consumo directo (en Egipto es legal su captura y consumo) son sus principales amenazas en el Mediterráneo. Junto a las tortuga Verde Carey, la tortuga Boba es uno de los reptiles que más llaman la atención de niños y mayores en su visita al Zoo Aquarium de Madrid.