¡Solo por tiempo limitado! Descubre cómo conseguirlo aquí
El siglo XXI no ha empezado muy bien para el Rinoceronte indio, del que apenas quedan 2.000 ejemplares, muy diseminados pese a su creciente protección.
Su cuerno, que en ocasiones supera los 50 centímetros, está relacionado con las prácticas medicinales orientales, que le atribuían ciertas propiedades (causa principal de su persecución y caza ilegal).
Mamífero de gran tamaño, puede medir más de tres metros de longitud y superar las dos toneladas de peso. Su piel, muy gruesa y de pliegues profundos, le da aspecto de animal “acorazado” y torpe. Sin embargo, se sabe que este rinoceronte es capaz de correr más de 50 km/h en tramos cortos.
Para librarse de los parásitos que se cuelan en la piel suele recurrir a los pájaros.
El Rinoceronte indio, como otros primos hermanos suyos, es un animal bastante solitario. Eso sí, en época de apareamiento y de cría se asocia sin dudarlo. Los machos tienen un largo y afilado colmillo incisivo que le sirve de arma para enfrentarse con sus rivales en la temporada de celo. La gestación dura 16 meses y el parto es único. La cría, una vez nacida, podrá quedarse con su madre hasta un nuevo período de reproducción, que tendrá lugar aproximadamente tres años después.
Este rinoceronte no tiene enemigos naturales y aunque anda solo, tampoco es difícil verle alrededor de las charcas en compañía de otros individuos. No en vano, pasan buena parte del día bañándose en estos fangos.